La operación delictiva realizada con tanta precisión, en la cual los ladrones no sólo estudiaron la forma de apoderarse del dinero y salir libremente con el botín sino que, además, previeron el accionar de la policía, ha llevado a los investigadores a sospechar cada vez más de la participación de algún efectivo de una fuerza de seguridad, militar o de inteligencia con la complicidad de alguno de los rehenes.
El viernes pasado en la entidad bancaria los delincuentes mantuvieron a 23 de rehén y desde el momento en que fueron liberados por la policía todos pasaron a ser una pieza clave en la investigación.
Del total de las personas que sufrieron el accionar de los delincuentes, los investigadores tienen a seis bajo la lupa. Según se pudo saber, existen algunos indicios que dejan creer en la participación de alguno de ellos en el golpe.
"Está todo el mundo bajo investigación, no sólo el personal del banco sino también el personal policial que trabajaba allí", había indicado el jefe de la Policía Bonaerense, Daniel Rago.
Juan Pablo Franco, vocero de la entidad afirmó que al momento del robo tanto la alarma como las cámaras de video "funcionaban perfectamente", y cuando se le preguntó si habían grabado las imágenes de los ladrones, respondió: "Efectivamente".
Esos videos ya "los tiene la Justicia, a la cual el Banco entregó todo el material que tenía como constancia" del robo dijo Franco y reveló que el contenido de los videos "lo hemos visto, pero no podemos declarar sobre eso" pero que se veían claramente porque "las cámaras han funcionado muy bien".
En tanto, los directivos del Banco Río anunciaron oficialmente que pagarán hasta 50 mil dólares a los titulares de las 145 cajas de seguridad saqueadas. "Banco Río va a asumir las responsabilidades que le corresponden, hasta el límite de 50 mil dólares por caja, tal como está previsto en contrato de cajas de seguridad, previa razonable comprobación del contenido declarado por el cliente", indicó Juan Pablo Franco, vocero de la entidad.
De concretarse la totalidad del pago a los damnificados, el Banco Río deberá desembolsar más de siete millones de dólares, una cifra que hasta hoy nadie sabe si esta por encima o debajo de lo sustraído por los delincuentes.
Por otra parte, empleados de la sucursal seguirán hoy recibiendo a clientes del banco donde el viernes pasado ladrones tomaron 23 rehenes y luego huyeron por un túnel con dinero y joyas de 145 de las 408 cajas de seguridad y 600 mil pesos del tesoro.
Los maleantes escaparon por un boquete hecho en una medianera de hormigón del banco que comunicaba a un túnel conectado a un desagüe pluvial ubicado a unos 15 metros, debajo de la calle.
Entre tantas dudas lo único cierto es que los delincuentes que se apoderaron, además de 600 mil pesos en efectivo del tesoro y las cajas de atención al público, del contenido de varias cajas de seguridad, desaparecieron y unas 145 personas perdieron sus ahorros.
Fuente: Infobae