El agua dulce es un elemento estratégico para el crecimiento de las naciones en el siglo XXI
Lo subrayó Carlos Pereyra Mele, especialista en geopolítica suramericana, y remarcó que la Argentina no hizo absolutamente nada en los últimos diez años para cuidar esta bien generando una crisis hídrica en el interior del país.
Mele remarcó que quienes tengan la disponibilidad del agua dulce, que conforma el 2% del mundo, va a tener grandes perspectivas de crecimiento. “Hay que subrayar que los Estados Unidos, Europa, Asia y sobre todo China requieren agua y la van a salir a buscar, porque el agua dulce ingresó ya en el ámbito económico”.
Con respecto a la situación de la Argentina dijo que desde el Estado, y durante los últimos diez años, no hizo absolutamente nada donde en el interior del país la circunstancias son muy críticas porque hay falta de agua, y las lluvias no alcanzaron a cubrir la demanda tanto para la industria, el campo y la población.
“Esto nos por un problema místico, ni de Dios sino es por un mal manejo del suelo y por permitir grandes obras a cielo abierto que consume agua que antes se derivaba hacia las grandes ciudades”, fustigó el especialista.
El licenciado citó los casos de la Ciudad de Córdoba, “que hoy tiene crisis hídrica, a la que se suman Catamarca, La Rioja, Santiago del Estero, Salta y Jujuy”, estas dos últimas capitales sufrieron en los últimos años aludes de barro como consecuencia de “la terrible desforestación”.
“Nuestro país está desde de la provincia de Córdoba hacia el norte del país con crisis hídrica, y nosotros no nos podemos permitir esos lujos”, remarcó Mele y volvió a subrayar: “Tenemos la zona del acuífero Guaraní que es el tercer reservorio de agua dulce mundial y no lo utilizamos”.
Luis Viviant
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