En el programa de Tinelli, Moria Casán discutió con el abogado del joyero paraguayo

Tinelli se comunicó con el abogado de Armando, llamado Carlos Rodríguez y éste aclaró que no había sido realizado aún el pedido de captura internacional porque sigue en pie el proceso de investigación. Moria Casán enfrentó los rumores de captura internacional por aquel incidente con el collar en Paraguay: “Mi discurso no cambió respecto de la semana pasada. Parece que siguió la causa después de haber declarado y hay algo que no entiendo. ¿Cómo me van a avisar que me van a detener? ¿A quién se le ocurre? Es todo un disparate judicial porque yo volví de allá en absoluta libertad. Que piensen de mí lo que quieran, pero preocuparon a mi familia al decir que estuve descompensada cuando no fue así. No me jodan porque voy hasta la corte de la Haya. Ganaron fama conmigo porque hicieron uso y abuso de mi imagen. Si viene la justicia paraguaya, acá me tienen”.

Su abogado, el Dr. Morla, indicó que solicitaron que Moria sea juzgada con leyes argentinas porque las paraguayas no dan ninguna garantía y que en caso de llegar una orden de captura recurrirán al juez federal de Morón con quien presentaron una eximición de prisión: “Moria Casán es víctima de hurto y vamos a denunciar al joyero”, declaró.

Marcelo Tinelli decidió llamar al celular del joyero Armando Benítez y ante la no respuesta del mismo, dejarle un mensaje. “La mujer debe querer venir al Bailando”, especuló Moria. Luego, el presentador se comunicó con el abogado de Armando, llamado Carlos Rodríguez y éste aclaró que no había sido realizado aún el pedido de captura internacional porque sigue en pie el proceso de investigación. “En su oportunidad estuve presente el mismo día que estuvo detenida en la comisaría de mujeres. Quería hablar con ella para saber qué había pasado e incluso me sacaron en el momento que estaba declarando”.

El Dr. Morla le preguntó la razón por la que los colegas paraguayos que contribuyen con la defensa de Casán no han podido tener acceso al famoso video que funcionaría como prueba del delito. Moria lo increpó: “¿Por qué no me revisaron en el momento en el camarín hasta la vagina y esperaron hasta el día siguiente a la tarde para bajarme del avión?”