A su vez, este viernes por la noche la Gendarmería detuvo en el barrio porteño de Flores a Darío Gastón Badaracco, acusado de asesinar a Araceli, quien se había fugado este jueves tras declarar por tercera vez en la causa.
"Sí, es el cuerpo de Araceli. Lo reconocimos en la morgue", señaló Ricardo Fulles ante la prensa, varias horas después de que la confirmación llegara a los medios por fuentes judiciales y policiales.
En medio de su dolor, se quejó por la forma en que llevaron adelante la investigación y dijo: "La fiscal (Graciela López Pereyra, a cargo de la causa) no sabe dónde está parada. Se trabajó de mala manera".
Efectivos policiales encontraron en la vivienda donde apareció el cadáver de Araceli un trozo de papel que tenía
escrita la inscripción: "Auxilio, Ara", que está siendo peritado para saber si fue escrito por la víctima y bajo qué
circunstancias.
Este viernes los investigadores custodiaron la vivienda en la que fue encontrada asesinada Araceli, y que pertenece a
Badaracco, el principal sospechoso del femicidio, quien se dio a la fuga y fue apresado por la noche en las inmediaciones de la Villa 1-11-14.
La casa está ubicada en la calle Alfonsina Storni 4477, de José León Suárez y los investigadores intentaban determinar si fue la escena del crimen, o si la mataron en otro lugar, y luego la enterraron ahí.
Badaracco fue atrapado en la intersección de Cobo y Curapaligüe, por un grupo comando de Gendarmería y luego
trasladado a la comisaría 38, en Bonorino al 200.
En el momento de la detención, los gendarmes detectaron al sujeto en la vía pública en esa zona de la Capital Federal y admitió ser el hombre buscado, por lo que fue reducido inmediatamente.
Según precisó el parte policial, Badaracco "fue reconocido por vecinos en inmediaciones" en esa esquina del Bajo Flores y, de esta manera, todos los sospechosos por el asesinato de Araceli Fulles están detenidos.