“Es la primera vez que me pasa. Ponen una especie de bloques de cemento en medio de la Panamericana para que los autos no puedan seguir avanzando. Pisás uno y destruís el auto. Los coches que lograban esquivarlos pasaban y me gritaban 'rajá que te afanan'“, indicó en Radio Mitre, donde tiene un programa.
El comunicador sostuvo que tuvo “suerte”, porque tras chocar con los bloques, pudo continuar viaje y se detuvo a unos quinientos metros del lugar de donde se encontraban los bloques.
Longobardi fue auxiliado primero por sus hijos, que circulaban en otro vehículo, y luego por la Policía, y no llegó a ser asaltado, aunque otros automovilistas no fueron tan afortunados.
“Era un espectáculo dantesco. Un hombre que circulaba en un Volkswagen, rompió una cubierta, tuvo que parar diez minutos, lo afanaron, cambió la rueda y siguió viaje como resignado, como si nada hubiera pasado”, contó.
El conductor radial indicó que al parecer “es algo que pasa todos los fines de semana”, como una modalidad habitual que sufren los automovilistas que transitan por ese sector del norte del conurbano.
“La gente que pasaba por ahí, desde los conductores y la policía hasta el gomero que fue a socorrerme, me dijeron que es algo que pasa todos los fines de semana”, explicó.
Se trata del segundo hecho de inseguridad que vive Longobardi en persona, ya que a mediados de febrero pasado fue asaltado y golpeado por “motochorros” cuando caminaba junto a un asistente en una calle del barrio porteño de Retiro y le sustrajeron el relojo que llevaba.
