Tombolini consideró que "de la mano del crédito hipotecario, hasta abril la construcción era uno de los sectores que mostraba los mejores indicadores de la Economía, pero hoy se estancó".
El presidente del CESBA advirtió que las cuotas de los créditos UVA, que se ajustan al ritmo de la inflación, están subiendo más rápido que los sueldos de los trabajadores.
Estos préstamos se indexan en función de la evolución de la inflación y no sólo afectan las cuotas sino también impactan en el capital.
Muchos acuerdos salariales se están cerrando con subas del orden del 15% y la inflación estimada por las consultoras se ubica en torno al 25%.
Señaló que otro de los efectos de la crisis fue la suba en el precio de las propiedades: "Este año se disparó el valor del metro cuadrado en dólares, si antes de la crisis cambiaria el salario real estaba ganándole a la inflación, ahora los sueldos en pesos quedaron estancados".
El excandidato a legislador massista en la Ciudad de Buenos Aires explicó que los que hoy realicen una operación de compraventa en el mercado inmobiliario "deberían sentarse a acordar un dólar de referencia".
Al finalizar la conferencia, el economista adelantó sus perspectivas para este 2018: un déficit fiscal primario de 2,7%; 1,8% de PBI; 26,8% de inflación y un tipo de cambio a 27,5.
El CESBA, que encabeza Tombolini, es un órgano consultivo integrado por 26 consejeros que maneja un presupuesto propio y que tiene por objetivo constituirse como un ámbito de debate, en donde se armonicen los intereses de las distintas organizaciones y se alcancen acuerdos para mejorar la calidad de vida de los porteños.
