La gestión Vidal ofreció el miércoles a los sindicatos del sector elevar al 32% el ajuste salarial anual, dos puntos por encima de la propuesta anterior, y un bono de 7.000 pesos por única vez.
Pero el FUDB rechazó la propuesta al considerar que no alcanza a la inflación, que este año terminará entre el 45% y el 47%, según las proyecciones de las consultoras privadas.
"La propuesta para el 2018 representa a todas luces una rebaja salarial de 15 puntos porcentuales, habida cuenta que la inflación anual se proyecta en torno al 47%", dijo el sindicato Suteba en un comunicado a sus afiliados.
Además, el gremio que conduce Roberto Baradel considera que "el bono sólo puede considerarse en este contexto como una dádiva", dado que sería pagado por única vez y la discusión paritaria de 2019 arrancaría sobre la base de sueldos más bajos.
En declaraciones a Radio Mitre, el ministro de Economía bonaerense, Hernán Lacunza, volvió a considerar hoy que existen motivaciones políticas en el frente sindical para no aceptar la propuesta salarial e impulsar una nueva huelga, la número 26 en el año.
"Los gremios que representan a la mitad de los trabajadores de la provincia de Buenos Aires aceptaron nuestra propuesta; cerramos el año con el bono de 7.000 pesos, que emparda en el bolsillo el aumento del costo de vida de este año", dijo Lacunza.
El funcionario agregó que la oferta del 32% sobre el salario común, más un presentismo equivalente a casi 7.000 pesos a lo largo del año, más este bono que es como un aguinaldo extra... si esto se suma el aumento ronda el 40%".
Marcelo Villegas, ministro de Trabajo bonaerense, dijo en declaraciones a radio La Red que si se suma el aumento salarial propuesto más el bono, el total de ingresos un año contra otro es del orden del 42,3%".