También denunciaron que los empresarios que administran Monsa integran "el Grupo Dota, que maneja más de 183 líneas de colectivos distribuidas en 66 compañías de la Capital Federal y el Gran Buenos Aires", indicó un comunicado.
"Los patrones argumentan que no pueden afrontar el pago de los salarios porque el gobierno nacional no depositó el subsidio respectivo. Es mentira. El grupo recibe subsidios millonarios de forma mensual. En abril y, solo por Monsa, se le transfirieron 116 millones de pesos, es decir, un promedio de 380 mil pesos por colectivo", detallaron los delegados en un documento de prensa.
Los representantes de base Néstor Marcolín, Esteban Simonetta, Santiago Menconi y Héctor Cáceres añadieron que "es inadmisible que grupos concentrados como Dota no abonen los salarios por un supuesto atraso de subsidios, cuando el transporte se lleva más de 7.500 millones de pesos de los impuestos ciudadanos".
Los delegados también denunciaron que esas empresas privadas funcionan con "el 100 por ciento de ayuda estatal y acumulan enormes ganancias que, en situaciones de emergencia y crisis, ocultan para demandar aun más dinero".