Pasadas las 6:00, cuando se abrieron las puertas de la sede gubernamental, se produjeron disturbios y corridas que llegaron hasta la puerta de Balcarce 50, pero con el correr de los minutos los ánimos se tranquilizaron.
Así, comenzaron a ingresar a la Casa de Gobierno quienes habían estado haciendo fila durante la madrugada para darle el último adiós al ídolo.
El caudal de participantes era incesante durante la mañana y muchos arrojaron camisetas, banderas y flores sobre la valla que separó a la gente de los restos del Diez.
El féretro está cubierto completamente por una bandera argentina, junto a las camisetas número diez de la Selección y de Boca Juniors.
Por decisión de la familia, el velorio se extenderá hasta las 16:00, aunque no se descarta que el horario se extienda.
El ingreso se desarrolla por Avenida de Mayo y 9 de Julio, desde donde los asistentes caminan hasta la entrada de la Casa Rosada por Balcarce 50 y salen rápidamente por Balcarce 24.
Los familiares e invitados de la familia Maradona, en tanto, pueden acceder por la explanada de avenida Alem, esquina Rivadavia, y para ese público fueron colocadas unas sillas alrededor del féretro.
La familia más cercana, sus compañeros de la Selección Argentina y amigos estuvieron durante la madrugada en la Casa Rosada, donde llevaron adelante una despedida íntima de Maradona.
En ese grupo estuvieron Claudia Villafañe, Dalma, Giannina y Jana Maradona, Verónica Ojeda y Dieguito Fernando.
También asistieron Guillermo Coppola, los integrantes del equipo campeón de México 86: Oscar Ruggeri, Sergio Batista, Julio "Vasco" Olarticoechea, Jorge Burruchaga, Ricardo Giusti, Carlos Tapia y Oscar Garré; y los referentes de Boca Juniors Carlos Tévez, Rolando Schiavi, Martín Palermo, quien lloró desconsoladamente, y Ramón Ábila, entre otros.