En provincia de Buenos Aires Juntos se impuso por una mínima diferencia sobre el Frente de Todos
La coalición opositora Juntos por el Cambio se impuso esta noche en las elecciones legislativas de la provincia de Buenos Aires por un margen de apenas un punto sobre el Frente de Todos, que logró así un empate técnico y achicó sensiblemente la diferencia que se había dado en las primarias (PASO) de septiembre.
La lista de diputados nacionales encabezada por Diego Santilli, Graciela Ocaña y Facundo Manes cosechó el 39,8% de los votos, mientras que la boleta del oficialismo liderada por Victoria Tolosa Paz y Daniel Gollan obtuvo el 38,5%, con el 97,6% de las mesas escrutadas.
Traducida en cantidad de votos, la diferencia fue de 114 mil votos y, de esta manera, el frente oficialista recortó la distancia de 4 puntos que le había sacado la alianza opositora en las PASO, en tanto, ambos espacios mejoraron su desempeño: Juntos por el Cambio creció dos puntos y el Frente de Todos creció cinco.
En tanto, la lista de Avanza Libertad que encabeza el economista liberal José Luis Espert logró ubicarse en el tercer lugar con el 7,5% de los votos y superó al Frente de Izquierda que encabeza Nicolás del Caño, que sacó el 6,8%.
Detrás quedó Florencio Randazzo, candidato de Vamos con Vos con el 4,3% y se quedaría afuera del Congreso al igual que Cynthia Hotton, de Más Valores, que obtenía el 2,9%.
Con estos guarismos, de las 35 bancas de diputados nacionales que renovó la provincia de Buenos Aires, Juntos por el Cambio se queda con 15 y el Frente de Todos con otras 15, mientras que las otras cinco serán tres para Avanza Libertad y dos para el Frente de Izquierda.
En el búnker del oficialismo, Tolosa Paz celebró el resultado como una victoria al señalar que "no hay imposibles para el Frente de Todos" y destacar la mejora respecto de los números de las PASO, al tiempo que subrayó: "El voto de confianza es para el Presidente de la Nación (Alberto Fernández) y para nuestro gobernador (Axel Kicillof) que jamás bajaron los brazos".
Santilli fue el último candidato en salir a hablar -decidió esperar por lo pareja que estuvo la elección- y, en primer lugar, agradeció a Manes, su ex rival en las PASO, por su incorporación a Juntos por el Cambio: "Gracias Facundo, esto lo hicimos juntos".
El diputado electo de Juntos afirmó que el mensaje de las urnas fue en favor de "una Argentina donde cada cosa esté en su lugar: los chicos en las escuelas, los trabajadores laburando y los delincuentes presos".
"Hoy ganamos todos los que soñamos con esa Argentina. Estamos contentos, pero la realidad es que nos esperan dos años muy difíciles", concluyó.
Por su parte, Manes afirmó: "Hemos ganado una elección pero no derrotamos a nadie. Lamentablemente en nuestro país todos vivimos una derrota colectiva. Hace años que venimos involucionando en aspectos sociales, económicos y educativos y nadie puede tirar la primera piedra".
La provincia de Buenos Aires es considerada "la madre de todas las batallas" debido a su peso determinante en el padrón nacional, con casi el 40% de los votantes, por lo que el ajustado margen de diferencia entre las dos coaliciones más grandes plantea un escenario distinto al que habían dejado las PASO de cara a 2023, el horizonte que miran ambos espacios.
Durante la campaña, y de cara a una derrota casi inevitable, el objetivo del Frente de Todos fue precisamente recortar la distancia que le había sacado Juntos por el Cambio en el distrito de mayor peso electoral y finalmente lo logró.
No obstante, la coalición opositora también alcanzó uno de sus objetivo al retener los votos que había conseguido en las PASO entre las dos listas que había presentado, una encabezada por Santilli y otra por el radical Manes.
La alianza opositora hizo la diferencia con la buena performance que logro en los distritos del interior bonaerense, mientras que el oficialismo pudo ratificar su predominio en el conurbano sur, más precisamente en la Tercera Sección Electoral, la más importante en cuanto a la cantidad de votantes.
Con los números obtenidos, la situación mejoró para el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, en la política doméstica, debido a que el Senado provincial quedaría con una leve ventaja para el oficialismo.