El macabro descubrimiento ocurrió ayer por la noche en una vivienda ubicada en la calle Avellaneda al 1300, entre San José y Herrera, en la zona norte del Gran Buenos Aires. El hijo de la víctima, de 65 años, se acercó a la casa de su madre ya que ésta no había respondido sus llamadas telefónicas. Al llegar, encontró la puerta sin llave y a la mujer tendida en el suelo del comedor cocina con un cuchillo clavado en su cuello.
Según los primeros indicios, los investigadores sospechan que se trata de un homicidio en ocasión de robo, ya que faltaban algunas joyas y el teléfono celular de la mujer. Además, no se encontraron señales de que la casa haya sido forzada.
La fiscal Carolina Asprella, a cargo del caso, ordenó realizar la autopsia correspondiente para determinar las causas de la muerte. Por el momento, se sabe que la mujer falleció debido a una hemorragia y shock hipovolémico causados por la lesión del arma blanca en el cuello.
La Policía comenzó a investigar el crimen a través de las cámaras de seguridad de la zona y a través de los testimonios de algunos vecinos del barrio, quienes afirmaron que la mujer solía tener las puertas abiertas y salir a tomar aire.
El caso ha conmocionado a la comunidad de San Isidro y las autoridades han intensificado la búsqueda de los responsables del crimen. La investigación continúa en curso para esclarecer lo sucedido y llevar a los culpables ante la justicia.