Los sospechosos fueron captados arrojando piedras a los trabajadores en la intersección de las calles O'Higgins y Neuquén. Una vez recibida la denuncia, los operadores del centro de monitoreo alertaron a los móviles policiales, quienes se dirigieron rápidamente al lugar.
A solo unas cuadras de distancia, los agentes lograron interceptar a los agresores y procedieron a su detención, poniéndolos a disposición de la Justicia para enfrentar las consecuencias legales de sus acciones.