Un mes después de celebrar su décimo aniversario, la relación entre Wanda Nara y Mauro Icardi parece estar al borde del precipicio. Los rumores de crisis, que circulan desde hace semanas, se intensificaron tras la difusión de imágenes de Wanda junto al cantante de cumbia L-Gante en un boliche porteño.
Mientras Icardi se encuentra en Turquía cumpliendo con sus compromisos futbolísticos en el Galatasaray, Wanda disfruta de la noche porteña, encendiendo las alarmas sobre el futuro de la pareja. El periodista Luis Ventura fue el primero en dar la noticia de la crisis en el programa "A la tarde", donde aseguró que las imágenes de Wanda con L-Gante serían la prueba definitiva del quiebre matrimonial.
Desde el entorno de Wanda, sin embargo, desmintieron la versión de un divorcio inminente. "Ella tiene la decisión tomada", afirmaron, dejando entrever que la separación podría ser un hecho. Laura Ubfal, por su parte, fue más contundente: en su sitio web dio por hecho el final del matrimonio y aseguró que "la división de bienes ya tiene su expediente en Italia y sólo faltaría firmar el divorcio".
La abogada de Wanda Nara, Ana Rosenfeld, salió a desmentir estas versiones. "Wanda no pidió el divorcio", enfatizó en declaraciones a Ciudad Magazine. "No hay ningún trámite de divorcio", agregó, negando rotundamente la información sobre la separación legal.
En medio de versiones contradictorias y especulaciones, el futuro de la pareja Wanda Nara y Mauro Icardi sigue siendo incierto. ¿Se trata de una simple crisis pasajera o del final definitivo de su matrimonio? Solo el tiempo lo dirá.