Detienen a dos sospechosos del intento de robo al Banco Macro en San Isidro
La Policía Bonaerense capturó a dos hombres vinculados al audaz intento de robo al Banco Macro en San Isidro. Los sospechosos habrían participado en la construcción de un túnel subterráneo de 150 metros para alcanzar la bóveda del banco.
La Policía Bonaerense detuvo a dos hombres implicados en el fallido intento de robo al Banco Macro en San Isidro, donde un túnel subterráneo de 150 metros fue excavado para acceder a la bóveda de la entidad bancaria. Este caso, que ha conmocionado a la localidad bonaerense, recuerda al famoso "Robo del Siglo" ocurrido en 2006.
Los detenidos, identificados como Alejandro Israel Rosendo López, oriundo de Paranacito, Entre Ríos, y Alan Daniel Rodríguez, ciudadano uruguayo residente en Montevideo, fueron capturados gracias a un operativo coordinado entre la Policía Bonaerense, Interpol y la policía uruguaya. López es señalado como el lanchero que facilitó el cruce de la banda entre Argentina y Uruguay, mientras que Rodríguez tiene vínculos con la barrabrava del club Nacional de Montevideo y una reconocida trayectoria en el ámbito criminal.
La captura de ambos sospechosos representa un avance significativo en la investigación, que se centra en desarticular por completo la organización detrás de este audaz plan. Las autoridades encontraron huellas dactilares de Rodríguez en el galpón utilizado como base de operaciones para la excavación del túnel. Este taller mecánico, ubicado a escasos metros del banco, fue clave en la planeación y ejecución del intento de robo.
Los dos detenidos ya están bajo custodia, y López ha sido trasladado a San Isidro, donde será indagado por los fiscales Carolina Asprella y Patricio Ferrari, quienes lideran la investigación. La policía continúa trabajando para identificar y capturar a otros miembros de la banda, estimados en al menos ocho delincuentes.
La fiscalía también está enfocada en identificar a los obreros que participaron en la construcción del túnel, con la intención de dar con el "cerebro" detrás de este sofisticado plan. Por ahora, la causa está caratulada como "tentativa de robo", y se investiga a la persona que firmó el contrato de alquiler del galpón utilizado como base de operaciones.