El bebé de un año y medio que fue baleado en medio de un conflicto vecinal en San Fernando sigue en estado crítico, según el último parte médico. El menor permanece internado en estado reservado en el Hospital Garrahan, donde se encuentra bajo soporte vital, que incluye ventilación mecánica y medicamentos para estabilizar su delicada salud.
El informe médico también precisó que, aunque la operación a la que fue sometido fue exitosa, su estado continúa siendo muy grave debido a las lesiones sufridas. El niño necesita una constante asistencia respiratoria y otros cuidados intensivos para intentar superar esta crítica situación.
El trágico incidente ocurrió durante una disputa vecinal en la localidad bonaerense de San Fernando, donde tanto el bebé como su padre resultaron heridos por disparos. Una mujer fue detenida, acusada de ser la responsable de los disparos que alcanzaron al menor y a su progenitor.
Luego del ataque, ambos fueron trasladados inicialmente al Hospital de San Isidro. Sin embargo, debido a la gravedad de las heridas del bebé, este fue derivado al Hospital Garrahan para recibir una atención más especializada, según informaron fuentes del Ministerio de Seguridad de la provincia de Buenos Aires.
Vecinos de la zona, conmocionados por lo ocurrido, expresaron su indignación y afirmaron haber escuchado más de diez disparos durante el conflicto. Uno de ellos señaló: "Estamos cansados de esta gente", en referencia a los involucrados en el enfrentamiento.
La comunidad sigue expectante por la evolución del menor, mientras las autoridades continúan investigando los detalles del violento suceso que afectó a esta familia.
