En diálogo con el periodista Daniel Burone Risso en el programa radial Desde el Medio, destacó que estos cambios buscan preservar el uso público de la costa del Río de la Plata y proteger áreas históricas y ambientales.
"Esto es una actualización del código, no una modificación integral. No se cambian ni las alturas máximas ni las hojas de zonificación", explicó Abella Nazar, quien detalló que las medidas incluyen la restricción de la construcción de viviendas en la costa. Según afirmó, la decisión refuerza políticas anteriores, como la revocación del permiso para un barrio cerrado en Martínez otorgado por gestiones previas.
El funcionario enfatizó que la medida tiene como objetivo garantizar que la costa se mantenga de uso público. "La construcción de viviendas no es compatible con esta visión. En el área entre Avenida Paraná y Uruguay, conocida como Parque de la Ribera, no se permitirá edificar viviendas en los lotes privados que existen allí", subrayó.
Otro eje importante es la creación de un área intangible de barranca, que protege el perfil natural de esta formación geográfica clave para el escurrimiento y la conservación ambiental. "Las construcciones deberán realizarse en las partes llanas, pero nunca sobre la pendiente", aclaró el subsecretario.
San Isidro continuará con su política de "borde blando" en la costa, complementada con un plan de puesta en valor del frente ribereño. En este sentido, se están realizando obras en la zona del puerto vinculadas al canal 33 Orientales, con vistas al bicentenario de la expedición que partió hacia la Banda Oriental.
Con respecto a estas localidades, Abella Nazar adelantó un plan de inversión público que destina el 20% del presupuesto municipal de 2024 a obras. Esto incluye mejoras en veredas, espacios públicos y el impulso al desarrollo urbano cerca de las estaciones ferroviarias. Una medida destacada es la reducción de las unidades mínimas de 50 a 35 metros cuadrados, facilitando la construcción de viviendas accesibles, especialmente para los jóvenes que desean permanecer en San Isidro.
La protección del patrimonio histórico también está contemplada en la actualización del código. Se reforzarán normativas para evitar demoliciones de inmuebles con valor arquitectónico. "Crearemos un mecanismo para analizar las construcciones previas a 1943 y determinar su relevancia patrimonial", explicó.
Sobre el futuro del proyecto en el Consejo Deliberante, el funcionario confió en que sea tratado antes de Navidad tras un mes de análisis y reuniones informativas. Finalmente, descartó rumores de cambios en zonas como la Avenida Libertador. "Queremos preservar el perfil residencial de esa área", afirmó categóricamente.
